Porque eran los canarios valientes, de grandes fuerzas y hombres de pelea y animosos; los cuales, de cuevas, que hay muchas en Canaria, salían, así como de fortalezas, y peleaban. ‘Vida y hechos de los Reyes Católicos’, Lucio Marineo Sículo (1444-1536)
La conquista de las Islas Canarias es el hecho histórico por el que este archipiélago, habitado por pueblos aborígenes, fue incorporado a la Corona de Castilla en el siglo XV. Dicho ataque por parte de los castellanos para su colonización duró 94 años, desde el año 1402 hasta el 1496.
Primeras civilizaciones
Las Islas Afortunadas o Fortunatae Insulae son conocidas desde la antigüedad en la época clásica y fueron numerosas las civilizaciones que intentaron apoderarse de ellas, debido principalmente a su estratégica situación geográfica en el Atlántico. Es difícil separar los relatos de los mitos oceánicos, como el de los Campos Elíseos o el Jardín de las Hespérides, de la antigüedad y las referencias directas a las islas, mezclándose con los conocimientos geográficos de la época, aunque ya se citaban en escritos la existencia de las ínsulas. Las civilizaciones que pasaron por ellas en la antigüedad, según los yacimientos arqueológicos encontrados, fueron la civilización romana, la fenicia, la bereber… En el documental Canarias Amazigh, las entrevistas completas: José Juan Jiménez, disponible en Memoria digital de Canarias-Multimedia, este conservador del Museo Arqueológico de Tenerife explica la llegada de diversas culturas a nuestra tierra. Pertenece a una colección de vídeos titulados Canarias Amazigh sobre diversas temáticas referentes principalmente al pueblo aborigen.
Conquista de las islas por los castellanos
Ahondando en la conquista de Canarias, los contactos mantenidos durante la Antigüedad clásica quedaron interrumpidos a partir de la caída del imperio romano. Durante la Edad Media, las primeras informaciones sobre las islas Canarias las aportan fuentes árabes que se refieren a islas atlánticas. A partir de principios del siglo XIV, acuden diversos países europeos al archipiélago como Génova, Mallorca, Castilla o Portugal. Compiten por el control de Canarias el pueblo genovés, aragonés, castellano y portugués, quedando reducida en el siglo XV a Castilla y Portugal, para posteriormente ser castellanizada, bajo el control y la administración de los Reyes Católicos.
Etapas de la colonización castellana
Se pueden diferenciar dos etapas: la conquista señorial y la conquista realenga. La primera fue realizada por la nobleza, en beneficio propio y sin una participación de los Reyes Católicos, donde fueron colonizadas las islas de Fuerteventura, Lanzarote, El Hierro y La Gomera. La segunda fue llevada a cabo directamente por la monarquía, adueñándose de las islas que faltaban por dominar Gran Canaria, La Palma y Tenerife. Atestiguan las crónicas que se han podido conservar, que opusieron mucha resistencia al defender su tierra, siendo batallas duras y sanguinolentas.
La conquista normanda
Jean de Bethencourt y Gadifer de La Salle protagonizaron la primera etapa de la conquista por motivos económicos, Bethencourt poseía factorías textiles y tintorerías y Canarias le ofrecía productos tintóreos como la orchilla, mientras que Gadifer deseaba conseguir un Señorío en las islas. La narración de la conquista normanda quedó recogida en la crónica conocida como Le Canarien, recopilada por los clérigos Pierre Bontier y Jean Le Verrier. En esta etapa se conquistaron las islas de Lanzarote (1402-1479), Fuerteventura (1401-1405) y El Hierro (1405).
La conquista realenga
El segundo periodo de la conquista de Canarias es organizado y armado por los Reyes Católicos, siendo financiada por la Corona castellana y particulares con intereses económicos en el archipiélago. Afecta a las islas de Gran Canaria (1478-1483), La Palma (1492-1493) y Tenerife (1494-1496), las más pobladas y las que ofrecían mejores perspectivas económicas. En las tres el pueblo aborigen muestra una clara y prolongada resistencia a la conquista.
Colonización y esclavización de la población aborigen
Tras la toma de todas las islas se inicia la época colonial, siendo un lugar de gran importancia por su situación geográfica, en el tránsito entre el continente europeo y el africano hacia el americano cuando también fue conquistado por los castellanos. Los puertos del archipiélago servían como punto de abastecimiento a las expediciones comerciales, como el envío de esclavos desde África a America y de este último a Europa, la ruta del oro y otros metales preciosos, ruta de la seda… También los aborígenes canarios se convirtieron al catolicismo y fueron esclavizados para atender a la nueva sociedad burguesa instaurada en Canarias y en la península Ibérica. Según relatan los cronistas de la época, algunos de los guanches prefirieron la muerte antes de ser conversos, y es muy conocida la historia del despeñamiento del guanarteme Bentejuí y sus hombres, en los altos de Tirajana en Gran Canaria, al grito de Atis Tirma que significa Por ti, tierra, aunque en el acervo popular isleño es más conocida la cita como Morir antes de entregarme.
Esta ha sido nuestra entrada de hoy. Esperamos que la hayas disfrutado.